Dos años han pasado desde el debut con Ikonoklasta. Su extrema y nihilista propuesta de death metal sigue adelante, además añadiendo nuevos elementos que la hacen más atractiva y adictiva.
Los que no los hallas escuchado deciros que Ruinas son la versión más violenta del death metal que os podáis echar a la cara, lo matizan con crust y grindcore. Los riffs son a toda hostia y crudos, empapados del primigenio death sueco más cañero, a ello también le ponen unas dosis de armonías épicas, sobre atronadores ritmos d-beat.
Ahora con que nos enfrentamos en Resurrekzión, pues con una banda totalmente identificables y con su propio sello. Un disco con unas canciones tremendas que sintetizan su estilo además de incorporar nuevas ideas que se acoplan al sonido Ruinas de manera impecable.
En esta entrega nos presentan seis temas, Eterno retorno aparece cogiendo velocidad, denso y destructor, la música de la banda tiene un punto más de “gordor” que en su anterior disco, nunca está de más. El primer tema es atronador se nos presentan delante como auténticas bestias, como unos Dismember anabolizados.
Tormenta de Miseria y Muerte es ultraveloz, las armonías son como cuchillos desollando sin piedad, además con esa aura macabra que envuelve a estos gallegos.
Ultimo vector una barrabasada grindcore con algún toque crust épico que a Ruinas le sale genial, apenas dos minutos de tralla.
Resurrekción también tiene una base muy grindcore, pero hay momentos en medios tiempos muy machacones, hasta una parte final guapísima donde van apareciendo los synths, además de mostrarnos las sorpresas que nos va a deparar el disco.
El concepto del disco va entorno a que ese bonito e idílico cuento de resurrección paso de la muerte a la vida, para nada es así. Si no oscuro y putrefacto, la sangre envenenada no da paso a la redención, ni a la vida, la cura no existe, la muerte siempre retorna o nunca se ha ido.
Rober cabeza pensante y detrás de la mayoría de los instrumentos, tiene también un amor por la música electrónica de tendencia darkwave, ambient, minimalista etc. (Varunian & Duga-3 proyecto totalmente ambient de Mr Bustabad, debajo os pongo en el enlace para que lo pilléis), pues Ex putrefacción va por esos derroteros totalmente ambiental, que da comienzo a otro aspecto del disco.
Lázaro es el último tema, con una duración de más de 17 minutos, donde Ruinas dan rienda suelta a su pasión por el darkwave y por la ambientación cinematográfica. El bajo también esta muy presente y le da un cuerpo tremendo al tema, esta maravilla también toca algo el industrial y ambient minimalista, distintos pasajes para un viaje a lomos de Lázaro.
Como conclusión deciros que tenemos una banda que ha venido para quedarse, que tiene ya conformada su propia identidad y que reina en el death-grind del estado. Que no tiene miedo de incorporar elementos a su fórmula maestra. Los que estéis huérfanos de Rotten Sound, Nasum etc aquí tenéis vuestra resurrección